Retro Amor: Marvel Vs Capcom 2

Los juegos de lucha nunca han sido santo de mi devoción. Me parecen sumamente aburridos para un solo jugador y sólo ligeramente divertidos si estás con amigos. Claro que hay excepciones, como Super Smash Bros, juego de lucha al que más me he viciado con amigos (aunque nunca en un sólo jugador); Soul Calibur, el juego de lucha al que más tiempo le he dedicado yo solo; y por supuesto, el juego que da nombre a esta entrada: Marvel Vs Capcom 2, uno de los mejores pega mamporros de la historia.

Marvel Vs Capcom 2 tiene un plantel de 56 personajes: 28 de Capcom y 28 de Marvel. Entre los cuales podemos encontrar nombres de la entidad de: Cammy, Akuma, Megaman, Morrigan, Hiryu, Colossus, Venom, Blackheart o Cable… por citar algunos. Al principio sólo contaremos con la mitad, y a la otra mitad tendremos que ir comprándola con los puntos que merecidamente ganemos en nuestros combates. Esto, que puede parecer una tontería, se convierte en algo realmente adictivo, y os puedo asegurar que no dejas de jugar hasta que consigues tener al último de los personajes. Además, y como es normal, cada personaje tiene varios “colores”, algunos de ellos especialmente currados y que también se podrán comprar en la tienda de personajes. Así que si quieres ver todos los trajes alternativos de cada personaje, vas a tener que jugar mucho.

Pero bueno, un montón de personajes entre los que elegir sería algo inútil (y sobre todo frustrante) si la jugabilidad no acompañase. Por suerte, este es el aspecto en el que MVC2 más destaca. Y es que a la hora de pelear no tendremos que elegir a un solo personaje, sino que haremos grupos de tres. Para perder el combate, nuestro oponente tendrá que tumbar a cada uno de los tres personajes que nos representan, dando esto lugar a remontadas realmente épicas y divertidas… o a auténticas palizas en las que un personaje tritura a otros tres. Además, la cantidad y espectacularidad de los combos que se pueden realizar es realmente impresionante. Y es que ver a Ryu, Ken y Akuma haciendo un hado-ken al unísono es sencillamente brutal. Más aún cuando para ello no tenemos que hacer combinaciones de botones imposibles, sino que normalmente basta con una o dos medias lunas. Todo un ejemplo de jugabilidad al servicio del jugador que muchos otros juegos podrían copiar.

Personajes y jugabilidad aparte, el otro gran punto de interés en un juego de lucha como éste son los modos de juego. Y en este apartado es quizás donde más flaquea el título de Capcom. Tan sólo contamos con los típicos modos Arcade, Versus, Training y una especie de Survival, es decir, lo mínimo exigible en un pegamamporros. Si a esta escasez de posibilidades le añadimos la inevitable comparación con el otro grande de Dreamcast: Soul Calibur, el resultado es desolador. Y es que sin llegar al punto de este último, un par de modos de juego extra no le hubiesen hecho ningún mal a MVC2. (Ya sé que también salió para PS2 y XBOX, pero por favor… no hay ni punto de comparación entre versiones).

En el apartado técnico, MVC2 tampoco es sobresaliente, pero por suerte no lo necesita. Los gráficos no son nada del otro mundo y están ligeramente pixelados, pero son suficientemente buenos como para ver el sufrimiento de nuestros rivales, que es lo fundamental. Los efectos de sonido y la música (especialmente el tema principal) tampoco es que destaquen mucho, pero al igual que con los gráficos, estos detalles para los juegos que los necesiten. A Marvel Vs Capcom 2 no le hacen falta unos gráficos y unos efectos de sonido alucinantes, porque es divertido a rabiar, y en cuanto juegas tres partidas, sólo estás pensando en jugar la siguiente, y entonces te dan exactamente igual los gráficos, la música, las voces y la madre que los parió.

Si a día de hoy quieres echarte unos vicios a MVC2 no lo tienes tan difícil como piensas. Null DC (el mejor emulador de Dreamcast) lo emula perfectamente y el juego se puede encontrar por unos 30€ en eBay UK, por no hablar de lo barato que se puede encontrar de otras formas… En cualquier caso, mi recomendación es clara: hazte con él, es vicio asegurado.